"Histórico parque, histriónica gestión"

Pasamos una desesperante jornada en este parque histórico al que le teníamos muchas ganas pero que su gestión nos amargó.

Desesperante porque no puede ser que en un día de fin de semana de puente festivo tengan las dos coasters majors funcionando con un único tren. Desesperante porque además de la poca capacidad, Steel Curtain fallaba más que una escopeta de feria y encima estaba operada de manera muy pésima. Desesperante por sentirnos estafados al comprar un Speedy Pass que no pudimos usar debido a que las colas las cerraron mucho antes de lo anunciado. Desesperante porque durante las horas que estuvimos no pudimos repetir en Phantom's Revenge, una maravilla de reconversión de coaster, un pacing espectacular, la verdadera sorpresa del viaje, menudos y tremebundos ejectors...

Fue una pena salir con tan mal sabor de boca de este parque tan histórico, con tantas joyas y con tan buen ambiente y decoración moderno-vintage pero la verdad que las experiencias negativas superaron con creces a las positivas.

Es una lástima que la joya de la corona de Parques Reunidos en USA también esté gestionado así de mal, con tantas luces como sombras.