Ya que el diario publica en català, os traduzco el artículo (en el enlace encontraréis el original).
- El plan director del proyecto de ocio y juego entre Vila-seca y Salou limita a 37 hectáreas el espacio para los complejos turísticos
- El gobierno descarta incrementar la edificabilidad en el área residencial situada a la zona de costa del sector
El complejo de ocio y juego previsto entre Vila-seca y Salou y conocido todavía como BCN World se limitará finalmente a tres casinos y se desarrollará en un espacio de sólo 37 hectáreas. Este es el dibujo preliminar que ofrece el plan director urbanístico (PDU) del sector del Consorcio Recreativo Turístico (CRT) que la comisión de Urbanismo de Tarragona tiene previsto aprobar inicialmente el viernes y que ayer ya fue presentado a la comisión de seguimiento del proyecto en la delegación del gobierno. Un dibujo que queda muy lejos del proyecto inicial que se presentó en septiembre del 2012 y que hablaba de 600 hectáreas.
Imagen virtual del gran parque público previsto al lado del complejo turístico. Foto: EL PUNT AVUI.
Límites a los cambios
El gobierno ha limitado los principales cambios de los parámetros urbanísticos en el sector de 103 hectáreas en el que se instalaran los ahora bautizados como complejos turísticos integrados (CTI), que combinaran el uso hotelero, el comercial y el de ocio con la presencia de un casino. La parte mayoritaria de este sector, que se sitúa entre Port Aventura y la autovía que conecta Tarragona y Salou (la C-31b), se dedicará, no obstante, a la creación de un parque público que ocupará 48 hectáreas.
Lo que sí que quedará fuera de cualquier modificación será la polémica zona residencial que está prevista en terrenos todavía propiedad de La Caixa entre la autovía C-31b y la costa. Aunque el avance de planeamiento que se presentó en enero apostaba por un aumento del suelo edificable en esta zona (privilegiando los usos turísticos), la Generalitat anunció que no tocará nada de la planificación vigente des del 2006 y que preveía 2.477 viviendas. "No se añade ni un solo metro cuadrado más de suelo residencial", subrayó el delegado del gobierno, Quim Nin.
Damià Calvet, director del Institut Català del Sòl (Incasòl), que tutela el proyecto desde la renuncia de Veremonte a la compra de los terrenos, vinculó el cambio al "proceso de diálogo intenso con el territorio", aunque también reconoció el peso de la oposición frontal a este aumento de la edificabilidad que había hecho el PSC. "No podemos olvidar que fue gracias al PSC que se pudo aprobar la ley que ha hecho posible el proyecto", dijo.
Cómo serán los complejos
Calvet también cerró las puertas "rotundamente" al hecho que el proyecto incluya finalmente los seis casinos que, como máximo, preveía la ley aprobada el año pasado en el Parlament de Catalunya. "El mercado es el que nos ha dicho que son tres los casinos que tiene que haber", detalló. Después de la primera fase del concurso y la retirada de Veremonte del proyecto que ella misma había impulsado, son tres los nombres que aspiran a una licencia: la catalana Grup Peralada, la china Melco y la norte-americana Hard Rock.
Una de las prioridades que marcará el plan director a las tres empresas candidatas es la necesidad que los complejos turísticos se construyan de manera unitaria e integrada. "Será necesario que los operadores hablen entre ellos para adecuarse a los proyectos de los otros", dijo Calvet. Los edificios se diseñaran siguiendo unos límites de ocupación de la parcela y de altura marcados en tres niveles: en el primer nivel, hasta 20 metros de altitud, podrán ocupar un 80% del espacio; en un segundo nivel, hasta 40 metros, un 40%; finalmente, la altitud máxima de los edificios podrá llegar a los 90 metros (unos quince por debajo de la atracción más alta de Port Aventura), pero tan solo podrán ser elementos o torres puntuales que ocupen, como máximo, el 5%.
Según detalló el director general de Ordenació del Territori, Agustí Serra, el plan también marca la obligatoriedad de presentar unos proyectos con "calidad arquitectónica". Por lo que refiere al suelo edificable, se sitúa alrededor del millón de metros cuadrados, repartidos entre aparcamiento (170.000 m²) y actividad económica (830.000 m²). De este último, 600.000 m² serán para uso hotelero, 120.000 m² para ocio (como restaurantes, centros de convenciones y teatros), 60.000 m² para casinos y 50.000 m² para uso comercial.
El plan director también prevé cambios en dos pequeños sectores más: uno para una futura ampliación del centro de convenciones de Port Aventura y otro para un nuevo hotel del parque temático.
Parque de 48 hectáreasA parte del proyecto turístico de carácter privado, el plan director prevé una serie de compensaciones de carácter público que afectaran tanto las zonas verdes como la vialidad. Así, se creará un gran parque que actuará de conector entre el actual parque de la Torre d'en Dolça, en Vila-seca, y la Sèquia Major, en la Pineda, y que se alargará como pantalla verde del complejo desde la autovía de Salou. Por otro lado, también se mejorarán los accesos y la viabilidad del CRT. Todas estas operaciones se incluirán en la urbanización que pagaran los operadores y que costará 200 millones de euros.
Reunión ayer de la comissión de seguimiento. Foto: ACN.
La aprobación definitiva, prevista para finales de añoLa comisión de Urbanismo de Tarragona se reunirá el viernes en una sesión extraordinaria que tendrá el plan director urbanístico del CRT como único punto del orden del día. Si finalmente acuerda la aprobación inicial, la publicación en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC) así como el inicio del período de información pública y alegaciones tendrá que esperar hasta septiembre, ya que agosto es inhábil. No obstante, el gobierno mantiene la previsión que la aprobación definitiva se producirá a finales de año, momento en que ya se podrá abrir el periodo oficial para que los tres operadores que aspiren a una licencia de casino presenten su proyecto definitivo. "Seguramente avanzaremos la publicación de las bases de esta segunda fase del concurso para que puedan avanzar trabajo", detalló Calvet.
El delegado del gobierno destacó que en la reunión de la comisión de seguimiento de ayer hubo un respaldo "generalizado" al dibujo del plan. Al salir de la reunión, Joan Pons, de la plataforma Aturem BCN World, a pesar de mantener su oposición al proyecto turístico, celebró la inclusión de un parque público y el hecho que no se aumente la edificabilidad a la zona residencial.