Me lo pasé genial, además viendo disfrutar a mi madre igual que lo hacemos todos nosotros del parque y espectáculos. Además, fue un día excelente, ya que eran las 9:30 cuando ya estábamos dentro del parque, y nos dirigimos a Furius Baco, al no haber nada de cola. Ver a mi madre con esa sensación de `quiero pero me da cosilla`, que una vez u otra hemos experimentado todos me hacía sacar cada vez una sonrisa más y más grande, y ya una vez subidos, arneses bajados y directos a la sala del pre-show, ¡y zas! De 0 a 135 km/h en 3,5 segundos. A mi madre le encantó, aunque lo que le daba más miedo era el inline, pero disfrutó de la atracción, y acabó con esa sonrisa de haber vivido mil y una sensaciones en apenas los 30 segundos que dura el recorrido. ¡Esas son las sensaciones que no se olvidan!
Pasamos a hacer todo el recorrido de atracciones de agua: Rápidos, Silver River Flume y Tutuki. Eran las 11:15 de la mañana, y ya llevábamos esa hora y poco aprovechada al máximo. Nos dirigimos a México, mientras las nubes van desapareciendo dejando paso al sol. No hay casi gente por el parque, cosa que se agradece, ya que ni apenas hacemos cola en el Diablo, y nos pasamos por Templo del Fuego, donde nos tocó con un grupito de gente mayor que alucinaron, chillaron, aplaudieron al final, y le dieron las gracias y mostraron lo que mucho que les había gustado a la asistente. Templo en sí ya me encanta, pero uno de los trozos que más es el trozo final, cuando se mueve la plataforma, que nadie se lo espera, y todos chillan. ¡Me encanta!
Una vez fuera de Templo, con el sol en su total plenitud y picando más que nunca, decidimos subir a Hurakan Condor. Aquí otra vez, mi madre no las tiene todas, pero la convezco. Nos toca la góndola de pie, y se pone más nerviosa. Y empieza a subir la góndola, y dejamos de tocar el suelo y empezamos a subir, subir, subir... Cuando salimos de la torre, un `ay Diós mío` y cierre de ojos por parte de mi madre, mientras yo intento tranquilizarla y decirle que goce de las vistas. El momento de la subida es el peor, aunque al final le acabas cogiendo gustillo. ¡Y caída! Yo bajo con las piernas templando y el pulso acelerado, como cada vez que subo, y mi madre con una cara de impresión y sonriendo. Le ha gustado. Y también una sonrisa se forma en mi boca. Incluso nos llevamos de recuerdo la foto de su primera vez.
Vamos a Mediterranea, y hacemos otro Furius, y nos dirigimos a Bang Bang West. Genial. Me encanta la expresividad de la chica, lo hace genial, al igual que los dos solados, los bandidos... Es igual que Fort Frenzee, un espectáculo que puedes ver una y otra vez sin cansarte.
Y después de comer en el puesto de Hot Dogs de la entrada a Far West desde Mediterranea (imaginaros si tuvimos tiempo que fuimos pisando todas las areas sin parar) decidimos hacer otro Tutuki, y mojarnos otra vez, aunque ya habíamos conseguido secarnos. Creo que ha sido una de las veces que me mojé más en Tutuki, ya que en el lift cogimos el salpicón de la barca que caía por la bajada principal, y yo que estaba en la parte exterior derecha, pues me empapé bien empapado.
Ibamos tan mojados, que en aves del paraíso nos sentamos en segunda fila, en pleno sol,a disfrutar del espectáculo bien fresquitos. Y ya se iba acercando la hora de marchar, dimos toda la vuelta por China y México para subirnos en Stampida, que era lo único que nos faltaba, e ir tirando hacia la estación de Renfe, los dos con una sonrisa: mi madre por habérselo pasado terriblemente bien, y yo por pasármelo una vez más genial y por acercar a mi madre un poco más a todas esas experiencias que vivimos nosotros en el parque, y que se lo pasare bien :P
Y aquí abajo os dejo un poco de todo, algunas de las fotos que hice ese día (que podéis encontrar en mi Flickr, link del cual también está aquí abajo) el link a la galería de fotos de PAC y un vídeo de un trozo que con el cual se me caen las lágrimas de Bang Bang West! :D
¡Un saludo a todos!