Las precipitaciones percibidas en los últimos días en la provincia de Granada han caído en forma de nieve en la estación de esquí de Sierra Nevada, que ha registrado su nevada más importante en lo que va de otoño.
La nevada se ha presenciado en las cotas más altas del macizo granadino, a partir de los 2.700 metros, y también ha llegado a la urbanización de Pradollano, constituida como el cuarto episodio de nieve de esta temporada, según han informado a Europa Press fuentes de Cetursa, la empresa que gestiona el espacio invernal.
Asimismo, han indicado que esta nevada es "estupenda para la preparación del terreno y el enfriamiento del suelo para una mejor fijación de la nieve a éste", pero que este hecho "no cambia los planes establecidos de apertura", según se ha explicado desde Cetursa. La nueva temporada invernal, que arrancará el 28 de noviembre, contará con mejoras —tras una inversión de tres millones de euros— como la renovación del telecabina Al Andalus, la intensificación de la iluminación para la práctica del esquí nocturno y la adecuación de espacios públicos en la zona de Borreguiles.
Mejoras para la nueva temporada
La renovación integral del telecabina Al Andalus, el remonte más usado y probablemente el más emblemático de la estación de esquí de Sierra Nevada, será más rápido a partir de esta nueva temporada, después de haber sido sometido este verano a una profunda renovación de elementos estructurales, mecánicos y electrónicos con motivo de los 25 años desde su puesta en servicio.
Con una inversión de más de dos millones de euros, este medio mecánico, que conecta la urbanización de Pradollano con el área de pistas de Borreguiles, ha sustituido este verano más de 400 poleas y 50 balancines, ha renovado toda la tornillería y sustituido todos sus elementos de desgaste. Dos de las 26 pilonas del remonte, las más próximas a la balsa de nieve producida, han sido renovadas para garantizar un mejor funcionamiento.
El telecabina ha incorporado un reductor nuevo, "algo así como un nuevo corazón", según los técnicos, que opera entre el volante del remonte y el motor eléctrico, lo que, junto a la renovación de toda la electrónica y los sistemas de refrigeración, permitirá al Al Andalus ser más rápido, hasta alcanzar una velocidad máxima de seis metros segundo, frente a los 5,2 de temporadas anteriores.
Paralelamente se han implementado medidas para la mejor accesibilidad de los usuarios, como la adecuación de las cotas de nivel al suelo de las estaciones superior e inferior para hacer más cómodo el acceso a las cabinas. Además, la estación ha invertido en la mejora de distantes instalaciones, entre las que destaca la reforma en el edificio Borreguiles —con nuevos baños públicos e impermeabilización de la terraza del restaurante—; nuevo centro de transformación del telesilla Monachil, cambio de cable del telesilla urbano Parador, instalación de fibra óptica en el telesilla Stadium y nuevo desembarque del telesilla Jara.
También se ha mejorado la iluminación de las pistas Río y Maribel para la práctica del esquí nocturno, la renovación de paravientos y la reparación de todo el parque de máquinas de tratamiento de pistas, así como la incorporación de una moto de nieve nueva al Servicio de Pistas, según ha detallado la consejera delegada de Cetursa, María José López.
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